“…La mayoría de los artículos indican que en los libros de texto los contenidos se presentan de manera desactualizada, con numerosas inexactitudes o errores conceptuales, o exponen miradas reduccionistas de los temas (Martins y Avelar Guimarães, 2002;Martínez-Gracia et al, 2003;Ferreira y Justi, 2004;Ibáñez y Ramos, 2004;Korfiatis et al, 2004;Snyder y Broadway, 2004;Alomá y Malaver, 2007;dos Santos et al, 2007;Malaver et al, 2007;Oliveira de Freitas y Martins, 2008;Schussler, 2008;Sullivan, 2008;Pérez Rodríguez et al, 2009;Quílez, 2009;Bonotto y Semprebone, 2010;Chris y Henry, 2010;Cohen y Yarden, 2010). Otro aspecto que se destaca es la inclusión de una gran cantidad de terminología científica específica, que solo es acompañada de un tratamiento superficial de los conceptos básicos, con definiciones operativas sin explicaciones conceptuales o con deficientes explicaciones de las ideas clave que permiten comprender los fenómenos expuestos (Guisasola, 1997;Barrow, 2000;Stern y Roseman, 2004;Ferreiro y Occelli, 2008;Kahveci, 2010).…”