influencia que ha tenido en América Latina; en tercer lugar, se revisan los enfoques de frontera respecto a la historia de los Llanos de Colombia, y, por último, se propone un aspecto complementario al análisis de la frontera: el estudio de la Orinoquia como lugar o región única en el contexto de la nación colombiana.
En este artículo se analizan tres cambios fundamentales que han ocurrido en el estudio de las fronteras en Colombia entre 1970 y 2003. Entre los temas de estudio se encuentran la transformación de la “frontera” como construcción histórica; el incremento en el número de estudios académicos acerca de la historia y la cultura de la frontera colombiana; y, finalmente, la integración de estos nuevos estudios de la frontera con el grueso de la historiografía colombiana. La autora concluye señalando que estas tendencias actuales seguirán en auge y deberán contribuir al mejor entendimiento del pasado colombiano.
El artículo se enfoca en la pandemia de gripa de 1918 y su impacto en Colombia. Tiene en cuenta la propagación y su efecto en la población, especialmente en Bogotá, durante el gobierno del presidente Marco Fidel Suárez (1918-1921) y el contexto de la Primera Guerra Mundial. La autora muestra la poca eficiencia estatal para enfrentar el problema de salud pública, en contraste con las iniciativas humanitarias como la de la Junta de Socorro, en un escenario donde las condiciones de higiene de las zonas marginadas y pobres de la capital posibilitaron la propagación del virus. Finalmente, a modo de consecuencia, muestra las medidas gubernamentales y cómo la pandemia influyó para que se iniciara la construcción de casas higiénicas y viviendas más modernas para los trabajadores, además del mejoramiento de la infraestructura hospitalaria.
When Frederick Jackson Turner delivered his paper "The Signifi cance of the Frontier in American History" at the meeting of the American Historical Association in 1893, he probably had no conception of the enduring impact that it would have on future research not only in the United States, but also throughout the world. Enthusiastically embraced by scholars in the fi rst half of the twentieth century, it was, in the latter half, vehemently criticized, redefi ned, modifi ed, reviled, or totally rejected as an explanatory tool by revisionists. Nevertheless, despite these many objections, the notion that frontiers play a discernable role in historical development continues to inspire young scholars to produce valuable studies that enhance our understanding of nation-state formation. Such is the case with the
scite is a Brooklyn-based organization that helps researchers better discover and understand research articles through Smart Citations–citations that display the context of the citation and describe whether the article provides supporting or contrasting evidence. scite is used by students and researchers from around the world and is funded in part by the National Science Foundation and the National Institute on Drug Abuse of the National Institutes of Health.