“…La metacognición aparece como agenda de investigación en la educación matemática en los años 80 (Desoete y De Craene, 2019) y, actualmente, ocupa un lugar destacado en la investigación en esta área científica, relacionándose por ejemplo con la resolución de problemas (Schoenfeld, 1992, González, 1996Gusmão, 2006;Díaz, et al, 2017), el rendimiento académico (Kambita y Hamanenga, 2018) y, más reciente, relacionándose con factores externos al estudiante, como los recursos, las metodologías y prácticas docentes (Gusmão, 2006;Venancio, 2020;Balderas;Páez y Martínez, 2020). Por un lado, hay mucha investigación que busca dar respuestas a cómo los estudiantes regulan y controlan sus pensamientos o acciones a la hora de resolver un problema; por otro, aún son escasas las investigaciones que buscan discutir como los factores externos, por ejemplo, recursos, estrategias y metodología utilizadas por el profesor pueden impactar en el desarrollo de la metacognición de los estudiantes.…”