Resumen. En este artículo realizamos una aproximación a diferentes paradigmas que se han ocupado del análisis de los movimientos sociales. Diferenciamos, grosso modo, cuatro etapas: en la primera, los estudios sobre los movimientos sociales se identifican, fundamentalmente, con el movimientoobrero. La segunda etapa se inicia con las revueltas de 1968, y en ella se diferencian las contribuciones teóricas norteamericanas representadas por la teoría de la movilización de los recursos, y las europeas definidas por el llamado paradigma de los nuevos movimientos sociales. Situamos la tercera etapa a finales de los ochenta, y la caracterizamos por el acercamiento entre las interpretaciones de los dos continentes, que coincide con el aumento y diversidad de movimientos sociales y que posibilita eldesarrollo de nuevas metodologías (procesos de enmarcamiento, estructura de oportunidad política yredes). La última etapa corresponde a las contribuciones formuladas en los últimos años en el contexto de la globalización y del debate sobre la institucionalización y normalización tanto de los movimientos como de la teoría.Abstract. In this article we carry out a limited approach to the different paradigms that have beenapplied to the analysis of social movements. We establish a rough difference between four different stages. In the first stage, study of social movements was identified, basically, with the Workers’ Movement. The second stage begins with the 1968 demonstrations; in this stage we can clearly distinguish between the theoretical contribution of American researchers, represented by the theory of mobilisationof resources, and that of the Europeans, who were defined by the paradigm of the New Social Movements. The third stage begins at the end of the 1980s and its main characteristic is the narrowing gap between the interpretations on either side of the Atlantic, which comes at a time when social movementsare growing in number and diversity, and favours the development of new methodologies (processes of frameworks, structure of political opportunity and networks). The final stage takes in the contributions formulated in recent years, and that occur in the context of globalisation, and the debate surrounding the institutionalisation and the normalisation not only of movements but also of theory.