“…El estudio cuantitativo más sólido y ambicioso en este ámbito es el desarrollado por el proyecto Selfiecity (Manovich, 2014), en el que se ha analizado el uso de esta práctica en diferentes poblaciones según el género, la edad, la posición socioeconómica, etc., gracias a la inmensa cantidad de material fotográfico que inunda las redes sociales (Cornelio, 2014;Zarrella, 2014). La selfie se ha estudiado también desde disciplinas diversas, como la psicología (Gabriel, 2014;Murolo, 2015;Tiefentale, 2015), la historia del arte (Murolo, 2015;Tiefentale, 2015) o los análisis semióticos (Broullón-Lozano, 2015; Cangas Sosa, 2015). Este trabajo tiene como objetivo contribuir al análisis de la selfie desde la perspectiva comunicativa y desde el enfoque del interaccionismo simbólico.…”