La presente investigación explora la capacidad de los modelos de escritura gráficos identificativos, inscripciones o símbolos identificatorios construidos, como uno de los principales instrumentos y medios con los que contaron los arquitectos para penetrar el complejo mosaico cultural en México, dispuestos para identificación de fachadas en edificios de 1914 a 1930; como expresión visual de manifestaciones culturales extranjeras que se hicieron propias e identitarias en la sociedad tampiqueña. Esos objetos de comunicación materializada son referentes del pensamiento tampiqueño moderno y actuaron como portavoces de las ideas políticas y sociales de la clase dominante (burguesa) interesada en la nueva corriente modernizadora progresista que llegó al país para inicios del siglo XX. Los modelos de escritura fueron auspiciados por ciertos grupos de poder locales que se vincularon con el transcurrir cultural, económico y político, y funcionaron como dispositivos visuales discursivo y representativos gráficamente; que fueron, principalmente, de orígenes extranjeros difusores de nuevos códigos de inclusión y exclusión social con la finalidad de ser modelos de civilidad. El objetivo de esta investigación es hacer una revisión sobre el estado del arte de la hegemonía sociovisual en los modelos de escritura y su relación con esa cultura. En consideración de John B. Thompson (2002) los medios de comunicación transforman potencialmente la cultura y la vida cotidiana de las sociedades sobre las que actúan. El método inicial se orientó en identificar el corpus de esos (49) objetos, su estudio textual y argumental con una exploración descriptiva e interpretativa a partir de la mirada del diseño. Para ello, se consideraron autores como R. Williams (1981), S. Hall (1984) y Verón (2005), mientras que la perspectiva metodológica para pensar la articulación entre hegemonía sociovisual y representación gráfica fue la hermenéutica profunda propuesta por Thompson con análisis discursivo sociohistórico. Esta investigación de enfoque cualitativo-interpretativo considera que los modelos de escritura sostuvieron imaginarios de progreso, y este registro gráfico no tematizado permitió vincular la dimensión cultural y visual con la dimensión política estructural; para luego identificar el diálogo entre esas dos dimensiones. Lo que resultó demostrable a través del análisis empírico historiográfico realizado en modelos de escritura y la comprensión clara del concepto de hegemonía sociovisual.