“…Incluso en algunos estados como Pensilvania, las armerías fueron consideradas negocios esenciales, por lo que permanecieron abiertas durante el confinamiento (Hatchimonji et al, 2020). En California, se estima que 110 mil personas compraron un arma de fuego como respuesta a la pandemia, de los cuales 47 mil lo hicieron por primera vez (Kravitz-Wirtz et al, 2020). En las ciudades de Nueva York, Chicago, Baltimore y Los Ángeles, Shutherland et al (2020) hallaron un aumento promedio de 34.7% en la verificación de antecedentes para la compra de armas en comparación a 2019, con datos del Buró Federal de Investigaciones (fbi, por sus siglas en inglés).…”