“…Cada vez, con mayor fuerza, el proceso de contratación de nuevos trabajadores se torna más exigente y demandante para los empleadores en general (Kinnunen y Parviainen, 2016). Si bien es algo que debe hacerse, las empresas con mucha frecuencia evalúan qué tan viable es incurrir en dichos tramites y costos (Clouet, 2020) cuando los trabajadores entran a suplir necesidades temporales. Como una alternativa, las entidades conocidas como agencias de empleo privado de trabajo temporal, empresas de outsourcing (Claus Wehner et al 2014;Navajas-Romero, 2017), proveedoras de mano de obra, o sencillamente empresas subcontratistas (ESC, en adelante) facilitan esta contratación a las empresas usuarias (EU, en adelante) con requerimientos de mano de obra específica y temporal, mediante un esquema de tercerización contractual (Dieuaide, 2018).…”