<p>Ciudadanía, participación y protagonismo de los niños como actores en todos los asuntos que les afectan, forman parte del conjunto de conceptos claves presentes en el discurso actual sobre la infancia, en el ámbito de las ciencias sociales, incluidas en éstas la pedagogía y la sociología. Este artículo se propone, en primer lugar, examinar el sentido y el contenido de esos conceptos principales y, en segundo término, analizar cómo podrían ser (y cómo lo están siendo) aplicados a las relaciones de los niños con su escolarización. Todo ello considerado en el contexto de un mundo globalizado y extensamente sometido a las leyes de la economía de mercado. La conclusión, en contra de lo que pudiera suponerse, es positiva, porque la infancia sigue representando, también dentro de un pensamiento sobre la buena sociedad, una esperanza de renovación y reconstrucción de un mundo y de una vida más humanas y más justas. En consecuencia, la apertura a una mayor y más considerada y efectiva participación de los niños en la vida social, partiendo del ámbito familiar, llegando al político y pasando por la escuela, puede representar una actitud clave para conseguir una sociedad más inclusiva, donde los derechos de todos los seres humanos tengan el mismo valor.</p>