“…Coincidiendo con el resultado obtenido en este estudio, los valores más altos de AS se cuantificaron a la tercer semana después de la aplicación del tratamiento. El efecto protector contra Forl, que mostraron las plantas tratadas con el EA, manifestado en mejora en el crecimiento y desarrollo de la planta, también fue reportado por Hayat et al, (2012), al aumentar concentraciones endógeno de AS, mejoró significativamente las características de crecimiento de las plantas incluyendo la altura, el número y color de hojas, el diámetro del vástago, el peso seco y fresco de la planta, así como también la tasa fotosintética. Para el caso de los resultados de este estudio, el incremento en la concentración de AS coincide con la mejora del desarrollo de la planta, así como la resistencia al patógeno, lo que concuerda con el papel importante reportado del AS en la acción protectora contra patógenos.…”