“…La renovación de los cafetales con variedades tolerantes a la roya, también denominadas resistentes o mejoradas, que requieren un alto uso de insumos químicos y poco o nada de sombra, ha sido la principal acción implementada por el gobierno mexicano y el sector privado para enfrentar la roya en el país (Cortina-Guerrero, Acuña-Zornosa, Moncada-Botero y Molina-Vinasco, 2013; Dirección General de Sanidad Vegetal, 2016; Libert-Amico y Paz-Pellat, 2018;Pérez-Fernández et al, 2016;Saldaña Argüello, Herrera Hernández, Parra Vázquez y Escamilla Prado, 2020;Valencia et al, 2018). Aunque los cafetos tolerantes pueden solucionar temporalmente el problema productivo, esa estrategia no considera los problemas ambientales derivados del monocultivo de café bajo sol como la degradación forestal, la pérdida de biodiversidad, la erosión de los suelos o la transformación y alteración de las prácticas productivas agroecológicas (Covaleda, Aguilar, Ranero, Marín, y Paz, 2014;Escamilla y Díaz, 2016; Libert-Amico, s/f).…”