“…12. Botella Ordinas (2000) analiza el contexto de la composición y publicación de la obra y da noticias interesantes -a pesar de alguna inexactitud-de la labor traductora de Salazar. Además de estas dos traducciones de obras de contenido político e histórico, sabemos que Salazar tradujo o participó en la traducción de dos obras literarias. Así, en una de las traducciones del Filocolo de Boccaccio (Treze questiones muy graciosas sacadas del Philoculo del famoso Juan Bocacio, Toledo, Juan de Ayala, 1546), Blasco de Garay cuenta en el prólogo cómo había visto en la biblioteca de Diego López de Ayala un manuscrito de la traducción y cómo le habían llamado la atención "los sumarios de las preguntas que iban en metro (o cópulas, por hablar más castellano)" que habían sido compuestos por Diego de Salazar, "que primero fue capitán y al fin ermitaño, varón en verdad el más suficiente en aquella arte, así de improviso como de pensado, que jamás tuvo nuestra España, de lo cual me encomencé a alegrar, por ser cosa de hombre que no solo me tenía por amigo, mas aun muchas veces, hablando entre otros de mí, me llamaba su compañero" (citado en Muñiz Muñiz 2003: 550, con grafía y puntuación modernizadas).…”