Gestado a comienzos de los años noventa en La Paz, y con la anarcofeminista María Galindo como una de sus integrantes más visibles públicamente, el movimiento social feminista boliviano Mujeres Creando lleva treinta años manteniendo formas de vida y acción estético-política situadas desde el disenso radical contra el capitalismo neoliberal, patriarcal y colonial. Han creado y sostenido en el tiempo diversos espacios autogestionarios abiertos a la comunidad, redes de apoyo, aulas de alfabetización y autoformación, una emisora de radio y otros lugares para el encuentro, la convivencia, la discusión y la política practicada desde la base, la cotidianidad y la atención a lo concreto. Su actividad se expresa además desde sus inicios en el espacio público urbano, mediante grafiteadas en los muros e intervenciones callejeras de distinta índole, que emplean estéticas irreverentes y corporeizadas para politizar desde un escándalo de raigambre y vocación plebeya. Este artículo enfoca esas manifestaciones en su dimensión ethopoiética, en tanto comportan una determinada estética de la existencia, enfatizando las zonas conflictivas que las colocan a contrapelo de las aproximaciones desde los lugares de enunciación de la academia.