“…El aprendizaje de las matemáticas compone tanto las operaciones aritméticas, la resolución de problemas algebraicos, como las ciencias exactas, es decir la geometría, la trigonometría, la estadística, la física, entre otras asociadas a la reflexión y al pensamiento lógico del individuo (Reyes et al, 2021); en este sentido, las metodologías activas proponen formas innovadoras de enseñanza, de este modo propone que el estudiante como un ente activo del proceso de aprendizaje, entable relaciones de interacción y comunicación efectivas con el docente y a su vez, participe de su propio proceso de adquisición de saberes, conocimientos y reflexiones. Por ello, la enseñanza de aprendizaje activo permite que el estudiante desarrolle habilidades de pensamiento crítico, y mediante el conocimiento absoluto de contenidos y resolución de problemas aritméticos, el estudiante además puede construir estrategias de resolución de problemas en la vida real y el contexto cotidiano.…”