El artículo aborda las principales continuidades y rupturas entre la era progresista y conservadora en las políticas educativas en el campo de la educación física en Uruguay (2005-2021). Desde cierta afectación del análisis de discurso de Pêcheux (1990) se seleccionó un corpus documental compuesto por leyes y decretos, planes y programas de estudio, y marcos curriculares nacionales. En la era progresista se impulsó la ampliación del acceso público a la educación física quien ocupó un papel clave en los programas de inclusión educativa y mostró gran potencialidad para la revalorización del trabajo en territorio y el abordaje intersectorial e interinstitucional. Se promovieron procesos de participación docente para llevar adelante esos cambios. Estas dimensiones fueron reducidas en el actual proyecto educativo conservador a partir del recorte del gasto público, la eliminación de algunos roles con énfasis en lo territorial y de cambios en los modos de participación. Si bien la incorporación del discurso de las competencias y de las habilidades socioemocionales se inició al final de la era progresista, en el actual gobierno adquiere mayor fuerza y este último se lo utiliza para fundamentar la educación física.