El fulgurante ascenso electoral de Fratelli d’Italia, que ha pasado del 1,9% al 26% en menos de diez años, y el nombramiento de su líder Giorgia Meloni como primera ministra, han suscitado numerosas preguntas, tanto en la comunidad científica como en los medios de comunicación, sobre la naturaleza de este partido: sobre sus raíces ideológicas, su estrategia, la fisonomía desu clase dirigente y sus vínculos internacionales. Se han hecho propuestas muy diferentes para clasificar a este actor político, adscribiéndolo a la extrema derecha, a la derecha radical populista, al neofascismo. La intención de este artículo, que reconstruye la trayectoria del FdI desde su fundación hasta nuestros días y sitúa su genealogía en el contexto de los acontecimientos de la derecha italiana, es demostrar que pertenece a otra familia política, la nacional-conservadora.