“…Casi nadie se pregunta por la imagen en sí misma donde asoma el NNA, por quién hizo la fotografía, la ilustración o la pintura, a razón de qué, en qué instante, o por qué es tan habitual y al parecer provechoso hacer de los NNA Camilo Bácares Jara 549 piezas visuales. Claramente, esta preeminencia no supone la inexistencia de investigaciones sustentadas o nutridas por las imágenes de historietas y caricaturas (Cosse, 2014;Sosenski, 2018), de ilustraciones de revistas para NNA (Bontempo, 2012;Scheinkman, 2017), del cine (Gremels y Sosenski, 2019, Rosen, 2015, de la fotografía (Freidenraij, 2021;González Gómez y Motilla Salas, 2016;Montaño Peña, 2020, 2022Osorio Cossio, 2016), de la pintura (Carli, 2011;Rojas Flores, 2010) y de las provenientes de los códices prehispánicos -en este caso de los mexicas en el siglo XVI (Díaz Barriga Cuevas, 2012)-para hablar de la infancia, de su multiplicidad de conjugaciones y entronques sociales, políticos, económicos y culturales, con el fin de traer a colación desde el registro visual sus especificidades en diversas culturas y momentos históricos.…”