“…No obstante, fueron las arquitecturas ef ímeras levantadas en honor a Pedro II y María Sof ía de Palatinado-Neoburgo, en 1687, 85 las que mejor sustanciaron estas ideas políticas. Así, junto a los Palacios de la Ribeira, se construyó un puente y un pórtico, con alegorías, emblemas y estatuas, entre las que se representó a África, cuya figura se acompañaba de tres emblemas, el segundo de los cuales, que tenía por mote «Novus terror Africae obortus, quod Serenissima Regina, ex Germania, in Lusitaniam transferatur» 86 representaba una flota cristiana navegando ante «[…] o mappa da barra de Lisboa, e nella huma fermosa Não com bandeira de Capitana, ornada de muitos galhardetes […] com as vellas largas, e cheias de prospero vento, e muitas outras naos de menor porte com bandeiras Inglesas, que vinhão em seguimento da Capitania […]».…”