“…La mayoría de trabajos que estudian la actividad alelopática de determinadas especies, normalmente se centran en ensayar el poder inhibitorio del aceite esencial (Dudai et al, 1999;Angelini et al, 2003;Scrivanti et al, 2003;Arminante et al, 2006;Azirak y Karaman, 2008;Verdeguer et al, 2009;Rolim de Almeida et al, 2010;Verdeguer et al, 2011) o de los extractos, principalmente acuosos (Dias et al, 1995(Dias et al, y 2004Fernández et al, 2006;Bagavathy y Xavier, 2007;Naseem et al, 2009), y en menor manera, extractos orgánicos (Yun y Choi, 2003;Pérez-Leal et al, 2005;Azizi y Fuji, 2006), sobre la germinación y el crecimiento de otras especies, pero en comparación con los anteriores, son relativamente pocos los trabajos que contrastan al mismo tiempo la actividad fitotóxica de aceites esenciales y extractos acuosos de la misma planta (Lee et al, 2002;Rosado et al, 2009). …”