“…Asimismo, describió que este motivo de consulta es la segunda indicación más frecuente de realización de EVDA de urgencias en niños después de la hemorragia digestiva y que la etapa preescolar (menores de 5 años) es el grupo etario con mayor incidencia (7). Cualquier CE es posible, siendo más frecuentes las monedas, el bolo alimenticio impactado y huesos de pollo o espinas de pescado (8,9). La ingesta de un palillo de dientes es rara, constituye en general el 9% de los casos (6); pero por su carácter cortopunzante y su tamaño se han documentado diferentes tipos de complicaciones secundarias a su perforación en el tracto gastrointestinal (TGI), incluyendo desde el alojamiento en pleura, hígado, pericardio, peritoneo, riñón, uréter y vejiga (10-15) hasta complicaciones más graves, como fistulas del duodeno con la aorta o la vena cava inferior (16)(17)(18).…”