“…Para los casos en los que la agregación espacial de datos puede comprometer su interpretación y análisis, los enfoques de Enmascaramiento geográfico o Geomasking, donde las coordenadas de ubicación son intercambiadas para limitar el riesgo de reidentificación después de la publicación de los datos (Molla et al, 2019;Zandbergen, 2014), pueden implementarse, preservando al mismo tiempo información suficiente para tomar decisiones basadas en estos datos. En el estudio de Houfaf-Khoufaf (2021), por ejemplo, utilizaron tres métodos de Geomasking y enmascararon con éxito las direcciones de un conjunto de datos de casos de COVID-19 en Francia, preservando más o menos la distribución espacial original de los aglomerados (Houfaf-Khoufaf et al, 2021). Sin embargo, como el número de estos estudios es todavía relativamente pequeño (Kwan et al, 2004), se necesitan más investigación para dilucidar cuestiones críticas como la efectividad de estos métodos en comparación con otras técnicas; 101 sus efectos en los análisis espaciales, la viabilidad de su implementación en sistemas de vigilancia basados en web y su valor para generar información relevante para los tomadores de decisiones en salud pública.…”