“…En este sentido, es importante prestar atención a todos los posibles factores físicos y fisiológicos predisponentes de lesión, como por ejemplo una alimentación inadecuada (Fernández, Gutiérrez & Castillo, 2007), la edad (Díaz, Buceta & Bueno, 2002), tiempos de inactividad prolongados (Bahr & Maehlum, 2007), historia pasada de lesiones (Starkey, 2012), fatiga (Clansey et al, 2012), etc. Cuando la prevención no es suficiente y se produce la lesión, es necesario utilizar procedimientos físicos adecuados que ayuden al deportista a recuperarse lo más pronto posible (Grubor & Grubor, 2012;Reuter & Mehnert, 2012). Por otro lado, no debemos olvidar que los factores psicológicos también desempeñan un papel muy importante en los procesos lesivos (Weinberg & Gould, 2010).…”