“…Para construir los índices con los que se va a medir el nivel de correspondencia, convergencia o representatividad, se han tenido en cuenta aquellas variables que pueden ser susceptibles de comparación en ambas poblaciones (ciudadanía y representantes); es decir, utilizando la información disponible sobre el perfil de la élite parlamentaria (género, edad, lugar de nacimiento, nivel de estudios y la ocupación) y su equivalente en la población, tal y como se recoge en los censos y los datos del INE (Coller, 2008: 147). Estas características han sido estimadas relevantes por la academia para estudiar los sesgos sociales de las élites parlamentarias (Norris y Lovenduski, 1995;Barragán et al, 2020;Coller et al, 2016Coller et al, , 2018Linz et al, 2013;Portillo y Domínguez, 2020;Serrano y Bermúdez, 2016). La estrategia de investigación es de tipo intensivo en una dimensión diacrónica.…”