Gracias a la documentación referida a la Casa Cuna de La Laguna, se ha estudiado la práctica social del abandono infantil en Tenerife a finales del siglo XVIII. Su análisis ha servido para reconstruir la frecuencia, las horas y la estacionalidad en la cual se producían las entradas registradas en la inclusa, como también la geografía de la exposición infantil o el sistema de recepción que la institución ofrecía a las criaturas abandonadas. Luego, en un segundo momento, hemos atendido a los cambios y permanencias que experimentó el fenómeno en el curso del siglo XIX.