Desarrollo larvario y supervivencia hasta la metamorfosis del erizo Tripneutes ventricosus (Lamarck) (Echinodermata: Echinoidea) alimentado con microalgas a dos temperaturas

Abstract

Abstract.-Larval development and survival of Tripneutes ventricosus up to metamorphosis were evaluated. Ten sexually mature specimens were collected from 'Faro de Charagato' to 'Laja Amarilla' (10º50'07"N, 64º09'33"O) Cubagua island, Nueva Esparta state, Venezuela. Spontaneous spawning of the organisms was produced during their transport to the laboratory. Pluteus larvae (2 ind mL -1 ) were randomly distributed into 16 plastic recipients (18 L) (32000 larvae/recipient), with 16 L of filtered sea water and continuous aeration. Two groups of eight recipients each were set up; one group was kept at outdoor temperature (29 ± 1°C) and the other one at laboratory temperature (23 ± 2°C). For each temperature Chaetoceros gracilis (50000 cells mL -1 ) was added as food to four recipients and a mixture of C. gracilis plus Isochrysis galbana (25000 cells mL -1 of each species) to the other four recipients. Survival was daily determined, from 4-mL sample taken from each treatment, and the live larvae were quantified. The body length was estimated every other day in five preserved larvae with 5% formaldehyde. Postlarval stage was attained 24 days after spawning in both culture temperatures. Morphological differences were not detected neither body length between treatments, however, survival showed differences (ANOVA, P<0.05) with the best results in larvae fed on C. gracilis and I. galbana mixture (30 ± 0.30%) at outdoor temperature.Key words: Morphometric, diets, experimental cultureResumen.-Se evaluó el desarrollo larvario y la supervivencia del erizo Tripneutes ventricosus hasta la metamorfosis. Diez ejemplares sexualmente maduros fueron recolectados entre el Faro de Charagato hasta la Laja Amarilla (10º50'07"N, 64º09'33"O) en la Isla de Cubagua, Estado Nueva Esparta, Venezuela. Se produjo el desove espontáneamente durante el traslado hasta el laboratorio. Larvas pluteus (2 ind mL -1 ) se distribuyeron aleatoriamente en 16 envases de plástico de 18 L (32000 larvas/recipiente), con 16 L de agua de mar filtrada y aireación continua. Se trabajó con dos grupos de ocho envases, uno mantenido a temperatura exterior (29 ± 1°C) y el otro a temperatura del laboratorio (23 ± 2°C). Para cada temperatura, se utilizó Chaetoceros gracilis (50000 cél mL -1 ) en cuatro recipientes y la mezcla de C. gracilis más Isochrysis galbana (25000 cél mL -1 de cada especie) en los otros cuatro recipientes. La supervivencia se determinó diariamente, tomando cuatro alícuotas de 1 mL por cada tratamiento y cuantificando las larvas vivas. La longitud del cuerpo se determinó cada tercer día en cinco larvas fijadas con formalina al 5%. La fase postlarval se alcanzó a los 24 días después del desove tanto a temperatura del laboratorio como del exterior. No se detectaron diferencias morfológicas ni en la longitud del cuerpo entre los tratamientos, sin embargo, la supervivencia mostró diferencias (ANOVA, P<0,05) con los mejores valores en larvas alimentadas con la mezcla de C. gracilis e I. galbana (30 ± 0,30%) a temperatura exterior.

Effect of thermal stress on survival and delay of metamorphosis in larvae of the purple sea urchin Strongylocentrotus purpuratus

“…Nonetheless, despite the research conducted on the effect of temperature on the development and survival of larvae of marine invertebrates (see Bassim andSammarco 2003, Randall andSzmant 2009), in particular echinoderms (see Johnson and Babcock 1994), little is known about the effects of high temperatures on settlement and onset of metamorphosis. There are reports on larval development of species of a more tropical distribution, such as Tripneustes ventricosus, which properly completes its development at temperatures of up to 29 ºC (see Rosas et al 2009). Chen and Chen (1992) found that larvae of Arachnoides placenta maintained at temperatures ranging from 28 to 34 ºC showed a decrease in percentage of metamorphosed larvae at the end of the experiments.…”

“…A pesar de los estudios realizados acerca del efecto de la temperatura en el desarrollo y la supervivencia de larvas de invertebrados marinos (ver Bassim y Sammarco 2003, Randall y Szmant 2009), en particular los equinodermos (ver Johnson y Babcock 1994), poco se sabe acerca de los efectos de altas temperaturas en el asentamiento y el inicio de la metamorfosis. Se han reportado desarrollos larvarios de especies de distribución más tropical, como Tripneustes ventricosus, que completa adecuadamente su desarrollo a temperaturas de hasta 29 ºC (ver Rosas et al 2009). Chen y Chen (1992) encontraron que las larvas de la galleta de mar Arachnoides placenta mantenidas a un intervalo de temperaturas entre 28 y 34 ºC mostraron una disminución en el porcentaje de larvas metamorfoseadas al final de los experimentos.…”