“…Aunque la mayor parte de los instrumentos clínicos de autoinforme se han diseñado para la evaluación de constructos psicopatológicos más o menos específicos (e.g., Belloch, Reina, García-Soriano y Clark, 2009;Pilatti, Godoy y Brussino, 2010;Sandín, Chorot, Santed y Valiente, 2002;Sandín, Chorot, Valiente y Lostao, 2009), también se han utilizado para determinar la sintomatología de aspectos más globales del individuo (e.g., Derogatis, 1990;Fonseca, Paino, Lemos y Muñiz, 2011;). El Symptom Checklist 90 (SCL-90;Derogatis, 1990Derogatis, , 1994Derogatis, Lipman y Covi, 1973), en sus diversas revisiones, es uno de los instrumentos de autoinforme de evaluación global de psicopatología más utilizado a nivel internacional, habiendo sido empleado con éxito en la investigación y en la práctica clínica para diferenciar entre diversas manifestaciones o trastornos psicopatológicos, para evaluar los cambios terapéuticos, en estudios de cribado, en investigaciones sobre calidad de vida, y para obtener indicadores globales de gravedad psicopatológica (Derogatis, 1994;Gempp y Avendaño, 2008;Hard, Gerbershagen y Franke, 2000;Jin et al, 2010;López, Fernández y Becoña, 2009;Strauman y Wetzler, 1992;Sandín, Chorot, Valiente, Lostao y Santed, 2002;Schmitz et al, 2000;Strauman y Wetzler, 1992).…”