Se discuten diversos aspectos de la sífilis congénita con énfasis en los siguientes: el hecho de que 60% de las madres que engendran niños sifilíticos no presentan evidencia clínica de la enfermedad; la necesidad de ordenar un mínimo de dos serologías, al comienzo y al final del embarazo, ya que 15% de las embarazadas reactivas lo son sólo al final de la gestación; la disponibilidad de la cordocentesis a partir de la decimaséptima semana del embarazo, con el fin de obtener muestras de sangre para diagnóstico prenatal; la aceptación de 9.600.000 U. de penicilina benzatínica para el tratamiento de la sífilis durante el embarazo; esta dosis evita los casos de niños Infectados que se han observado con el esquema de 7.200.000 U.