“…En lo que concierne al contraste entre el castellano y el catalán, cabe añadir que, pese a estudios anteriores, hacia finales del siglo XX cobraron auge con los trabajos de Wesch (1997de Wesch ( y 2002 y Sinner (2004), que se acercan, desde una perspectiva sincrónica y de manera sistemática, a su descripción. Desde entonces la investigación sobre los rasgos distintivos del castellano de Cataluña no ha parado de cobrar interés y se enriquece por la vertiente diacrónica (Rey Méndez 2009;Matilla Romero 2015;Poch Olivé 2017;Gallardo Richards 2019).…”