Aesthetic Experience in Everyday Worlds: Reclaiming an Unredeemed Utopian Motif

Abstract

Powerful and influential voices in the early 20th century, mainly from the European and American Left, were criticizing the institutional status of "aesthetic autonomy" as a pathological situation and proposing, as a utopian horizon, a fusion between the everyday and aesthetics. Today, in contrast, we are more impressed by the idea of a profound incompatibility between aesthetic experience, on the one side, and everyday life, on the other. This conviction, according to which a difficult-to-achieve exception brings together aesthetic experience and everyday life, is the starting-point for a threefold distinction that this essay will develop. This distinction enumerates three different types of situations in which aesthetic experience can occur under everyday conditions: there are, in the first place, those cases where aesthetic experience seems to impose itself, interrupting the undramatic flow of the everyday; there are, at the opposite end of a range of possibilities, situations where a longstanding familiarity with an object ends up turning into an aesthetic experience; finally, there are those cases where a change of the situational framework under which we experience the everyday seems to occur "behind our back," thus opening up the possibility of aesthetic experience.

From the adulated author of antiquity to the powerful modern publisher

“…La experiencia estética de ver obras de arte, sugiere Gumbrecht (2006), produce un placer que es independiente de los propósitos y funciones que perseguimos en nuestra vida cotidiana. Csikszentmihalyi y Robinson (1990) la han denominado experiencia óptima, Alexander (2008aAlexander ( , 2008b, experiencia icónica consciente, y Griswold (1987b) ha mostrado que sus significados se producen localmente.…”

“…Con esta investigación contribuimos al avance del conocimiento de la experiencia estética con obras de arte expuestas en museos en diferentes aspectos. Hemos demostrado que tanto el efecto como el contenido de la experiencia estética con obras de arte (Gumbrecht, 2006) exhibidas en museos varían según dos condiciones: (1) la conciencia del individuo de estar delante de una obra de arte original y (2) el capital cultural contextual del individuo necesario para interpretar el valor de culto de una obra de arte en un contexto cultural local. Este resultado contribuye al desarrollo de la teoría de la experiencia icónica con obras de arte de Alexander (2008ade Alexander ( , 2008b, la cual sugiere que el contenido y el efecto de la experiencia estética pueden variar según los individuos y las obras de arte.…”

“…Nuestro objetivo en esta investigación fue encontrar una respuesta para esta pregunta describiendo cómo el contenido e intensidad de las experiencias estéticas de los visitantes de museos de arte variaban según el objeto estético y bajo condiciones diversas. Para ello estudiamos las experiencias de los consumidores con obras de arte, enmarcándolas teóricamente de la siguiente forma: (1) sustantivamente, estudiando las experiencias estéticas con las obras de arte expuestas en museos desde el paradigma de la sociología cultural (Griswold, 1987a,b;Alexander y Smith, 2001;Hennion, 2001;Woodward, 2001Gumbrecht, 2006Acord & DeNora, 2008); y (2) metodológicamente, estudiando la experiencia estética desde la tradición interpretativa (Lincoln & Guba, 1994;Patton, 2002).…”

Iconic Consciousness: The Material Feeling of Meaning

“…For Gumbrecht, the aesthetic is a defamiliarization process. It is Proust's hypnotically arresting Madeline, the awesome gates to Shinto temples, the shockingly 'beautiful run, pitch, throw, or jump' that creates the 'moment of intensity' in the midst of a game, the 'special feeling' that allows us to step outside a merely instrumental or 'interested' position (Gumbrecht, 2006a(Gumbrecht, , 2006b.…”

Consciência icônica: o sentimento material do significado

“…Para Gumbrecht, a estética é um processo de estranhamento. É o hipnotismo de Proust prendendo Madeline, os extenuantes portões de templos xintoístas, o correr, passar, driblar e chutar que cria o "momento de intensidade" no meio de um jogo, o "sentimento especial" que nos permite sair de uma posição meramente instrumental ou "interessada" (Gumbrecht, 2006a(Gumbrecht, , 2006b). …”