“…Tomando en consideración el total del conjunto poblacional, los índices de mortalidad de los diferentes territorios argentinos dan cuenta de las tendencias antes mencionadas. En 1918, año en el que la gripe causó la menor cantidad de muertes, las tasas de mortalidad por 10 000 habitantes fueron las más altas para las provincias del norte; se exponen los guarismos para todas las provincias a fin de realizar una comparación: Salta (9,8) y Jujuy (7,3), les seguían Corrientes (6,6), Mendoza (6), San Juan (5,6), Entre Ríos (4,8) y San Luis (4). En un último grupo se encontraban Córdoba (2,9), Capital Federal (2,7), Buenos Aires (2,1), Santa Fe (1,9), Tucumán (1,4), La Rioja (1), Santiago del Estero (0,7) y Catamarca (0,3).…”