A challenge to unqualified medical confidentiality

Abstract

Medical personnel sometimes face a seeming conflict between a duty to respect patient confidentiality and a duty to warn or protect endangered third parties. The conventional answer to dilemmas of this sort is that, in certain circumstances, medical professionals have an obligation to breach confidentiality. Kenneth Kipnis has argued, however, that the conventional wisdom on the nature of medical confidentiality is mistaken. Kipnis argues that the obligation to respect patient confidentiality is unqualified or absolute, since unqualified policies can save more lives in the long run. In this paper, I identify the form of Kipnis's argument and present a challenge to it. I conclude that, as matters stand now, a qualified confidentiality policy is the more rational choice.

Confidencialidade em medicina ocupacional: protegendo informações

“…O embrolho gira em torno de um cenário em que o médico está diante de um dilema sobre informar a esposa (também sua paciente) de seu paciente que ele está com infecção pelo HIV 46 . Para Gibson 47 , a posição de Kipnis é insustentável, pois, dentre vários outros aspectos, rompe com o princípio da equidade (justiça) e, para Bozzo 48 , a decisão de romper o sigilo nessa circunstância deve ser baseada em escolha racional.…”

Equipoise and ethics in educational research

“…But this is often thought not to be an absolute rule, one that can never be rightfully broken. If serious harm is believed to result to innocent third parties from keeping confidential a specific piece of information then ethics may permit and even require medical professionals and teachers to break confidentiality and reveal the information (Bersoff, 2014; Bozzo, 2018). Confidentiality is outweighed or trumped by something more important, a moral obligation to prevent serious harm coming to others.…”

Los sistemas de alerta temprana, una herramienta que fortalece la vigilancia epidemiológica en el marco de la seguridad y salud en el trabajo

“…Es importante que exista una gran responsabilidad, compromiso y una formación ética que mantenga la confidencialidad de la información y ejerza la imparcialidad en el momento de ejecutar las actividades. Deben establecerse los requisitos mínimos necesarios para que el trabajo se encuentre dentro de los parámetros considerados éticos, los cuales deben estar claramente establecidos y justificados, prácticos e implementables, y deben estar articulados con el componente legal que garantice la seguridad de la información para que no se comprometa la funcionalidad e imagen de la empresa(43)(44)(45)(46)(47)(48).Finalmente, el SAT tiene una importante función en la emisión de la información de forma oportuna; por tal motivo, cada etapa del modelo debe complementarse y acompañarse con habilidades en la comunicación del riesgo, que abarque el establecimiento de los componentes de cada mensaje clave que se deba emitir (caracterización del individuo y de la situación, tipo de población afectada, área de trabajo al que pertenece), la estructura a partir de la cual va a fluir la información desde el trabajador hasta el grupo de SST y cómo desde este grupo a los encargados de tomar decisiones(49,50).…”