“…Por otra parte, también se han construido instrumentos genéricos y otros específicos para medir la calidad de vida (7,10). Lo anterior, evidencia que existe mucho interés por estudiar la calidad de vida de las personas, enfocándose algunas investigaciones hacia los instrumentos que miden la calidad de vida (7,10), o el ámbito laboral (15), y al contrario, otros poseen un enfoque clínico asociado a una patología en particular (3,11,16,17). Y aunque existen investigaciones que permiten visualizar la incipiente relación entre el área de dirección estratégica con el ámbito de salud, como el estudio de Dos Santos y Giovanella (18), que analiza las estrategias de la dirección regional de salud, o el artículo de Ceola Schneideret al (19), que estudia el seguimiento de estrategias y el estudio de Onocko-Campos et al (20), que evalúa las estrategias innovadoras en los organismos de salud, entre otros, no se visualizan artículos que relacionen la calidad de vida de las personas con las directrices estratégicas sanitarias de un país a partir del área de dirección estratégica.…”