“…El anuncio tuvo lugar "con motivo de la visita de Lula a España, representando un salto cualitativo en las relaciones bilaterales consistente en la creación de una alianza estratégica que sería implementada con la elaboración de planes bianuales de acciones, con el objetivo de estimular el comercio bilateral, las inversiones y las negociaciones entre la UE y el MERCOSUR" (Ayllón, 2014: 36). A partir del año siguiente, la victoria electoral de José Luis Rodríguez Zapatero y el buen entendimiento con su par brasileño permitió ampliar y reconfirmar el mutuo interés, más allá de que el Brasil de Lula ya aspirara a jugar en las "grandes ligas de la política mundial" (Caballero, 2011) y fuera reacio tanto a aceptar la injerencia de España en la región latinoamericana como a permitirle tener un peso específico de las Cumbres Iberoamericanas 2 , en lo que consideraba su área de influencia, máxime tras la constitución de Brasilia de 2007 que daba cobertura jurídica al surgimiento del proyecto brasileño de la Unasur (Caballero, 2019b). En la línea del entendimiento mutuo, cabe resaltar la Declaración de Brasilia sobre Consolidación de la Asociación Estratégica de 2005, que aspiraba a abrir la agenda meramente económico-empresarial, a una agenda más social, que incorporara la cooperación, el desarrollo y la lucha contra la pobreza, en consonancia con las propias políticas sociales impulsadas por ambos presidentes.…”