En el canónico poema “Amo a mi amo” de Nancy Morejón (n. 1944, Cuba), la “afectividad racializada” (Tyrone S. Palmer) que emerge del contacto violento entre los cuerpos y las subjetividades de una mujer negra esclavizada y un hombre blanco esclavizador excede los parámetros de lo representable. De ahí que en mi relectura no busco una descodificación nítida de “Amo a mi amo.” Por el contrario, bajo la inspiración de Édouard Glissant y su “poética de la relación,” opto por tomar una ruta algo espinosa de concederle al poema, a su hablante, y a su autora, sus respectivos y bien merecidos “derechos a la opacidad”