“…(Zahareas y Pereira 1990: 297) Otro claro ejemplo de las adueñaciones genéricas del autor lo leemos en el planctus 10 por Trotaconventos, cuyo acto discursivo se dirige al lector en un tono increpante y de imprecación 'que sólo se suaviza cerca del final al recordar el triunfo de la Vida que significa la Resurrección de Cristo' (Carrizo Rueda 1987: 92):9 Sobre la tradición árabe y hebrea en el Libro véase el estudio deHamilton (2009), publicado en La Corónica. 10 María Emilia García Jiménez recoge la definición de Lecoy de este tipo de literatura: 'pièces lyriques où un suivant deplore la disaparition d'un être cher ou respecté, d'un parent, d'un ami, d'un protecteur' (1994: 13), lo cual contrasta ampliamente con el uso dado por Juan Ruiz.LUP_BHS87_4_02_Munoz-Basols.indd 401 03/06/2010 10:28…”