“…Para el estudio del burnout en el contexto académico se adaptó el Maslach Burnout Inventory-General Survey (MBI-GS), dando origen al Maslach Burnout Inventory-Students Survey (MBI-SS). La aplicación de este último demostró que los estudiantes también pueden sufrir burnout, caracterizado por un desgaste físico y emocional, no se sienten con la capacidad de poder cumplir con sus tareas académicas, sienten inseguridad de sí mismos, falta de interés y motivación para seguir adelante (Osorio, Parrello y Prado, 2020;Palacio, Caballero y Suárez, 2017). El MBI-SS evalúa el agotamiento, la baja eficacia académica y el cinismo, este último en lugar de la despersonalización, que incluye las actitudes negativas, de indiferencia y de distancia hacia el estudio (Schaufeli, Martínez, Marques, Salanova y Bakker, 2002).…”