Una nueva pequeña tésera celtibérica

Tésera celtibérica en forma de cierva procedente de

“…), y, ya más lejanamente, podría relacionarse con otras dos téseras igualmente en forma de toro, una de Fitero, Navarra (Díaz y Jordán, 2006) y otra probablemente de Extremadura (Almagro-Gorbea y Ballester, 2017). Más rara resulta su clara estructura tripartita, que sólo permite relacionarla con la tésera en forma de suido supuestamente procedente de la provincia de Cuenca (Tovar, 1983;Untermann, 1997: 546 s., K.0.6; Almagro-Gorbea, 2003, 392, nº CP-11), pues esta tésera ofrece igualmente los cuartos delantero y trasero resaltados sobre la zona central, detalle que también se puede percibir, aunque ya sea menos patente, en la tésera de Arcobriga en forma de oso o de toro (Torija y Baquedano, 2007: Simón, 2013. En esencia, los paralelos estilísticos, aunque sean algo imprecisos, apuntan a la Celtiberia meridional como la zona más probable de fabricación y parecen confirmar la autenticidad de esta tésera, pues su forma de cérvido no estaba documentada con anterioridad.…”

Tésera uxamense con inscripción celtibérica

“…5). De ellas, 5 tienen procedencia segura: La Custodia en Navarra (Labeaga, 1987;Untermann, 1997: 697 s., nº k.18.1;Simón, 2013: nº T12), Monte Bernorio (Torres y Ballester, 2014) y Herrera de Pisuerga (García Bellido, 1996;Castellano y Gimeno, 1999), en Palencia, y dos de Vxama Argaela, Osma, Soria, la aquí publicada y otra dada a conocer anteriormente (Untermann, 1997, 708 s., nº k.23.2;Simón, 2013, nº T11); otras 2 se suponen halladas respectivamente en las provincias de Cuenca (Tovar, 1983;Untermann, 1997, 546 s., nº k.0.6;Almagro-Gorbea et al, 2004: 308 s., nº 606) y de Ávila (Turiel, 2000, 305 s.;Almagro-Gorbea y Turiel, 2003, 214 s.;Almagro-Gorbea et al, 2004: 299 s., nº 593) y 2 más carecen de procedencia (Faria, 1998, nº 1 y 2). De estas téseras de suido, cinco tienen forma de bulto redondo cortado longitudinalmente: la aquí publicada de Vxama Argaela-2, La Custodia, una de la colección Daenhnhardt (Faria, 1998, nº 1), otra de Cuenca y otra de Ávila, además de otra de la colección Daenhnhardt (Faria 1998, nº 2), que se ha llegado a considerar un oso por su morro recto y porque las patas parecen tener dedos hacia adelante.…”

“…2,8-9 y 11;id., 2006, fig. 6, nº 44, 45, 47, 48), yacimiento que se ha identificado con la Vareia prerromana (TIR, 1993: 236), importante población de los bérones (Tovar, 1989: 77 s.), probablemente destruida durante las guerras sertorianas, pues Sertorio tomó Vareia en el 76 a.C. (Liv. fragm.…”