“…En los Llanos Orientales, los liberales se alzaron en armas y crearon un ejército irregular de unos 7000 guerrilleros, que estaban al mando de Guadalupe Salcedo Unda, Eduardo Franco Isaza y otros (Pizarro Leongómez, 1989). Las llamadas 'guerrillas del Llano' alcanzaron un alto nivel de desarrollo organizativo y político, como se evidenció con la promulgación de la Primera Ley del Llano, el 11 de septiembre de 1952 (gobierno Urdaneta), y la Segunda Ley del Llano, el 18 de junio de 1953 (gobierno Rojas Pinilla), y con la creación de su propio 'Comando Nacional de Coordinación' (Pizarro Leongómez, 1989). A medida que el mando se fue unificando alrededor de Guadalupe Salcedo, las órdenes se convirtieron en normas y estas, en leyes del Llano.…”