IntroducciónAunque resulte paradójico este editorial aborda la situación actual de una especialidad, la Reumatología Pediátrica (RP), que oficialmente no existe en España. Esto es así porque en el año 2014 las especialidades pediátricas continúan sin ser reconocidas oficialmente en nuestro país. El hecho de que no exista reconocimiento legal implica que ni existen unos requisitos mínimos para ejercer adecuadamente la especialidad ni se dispone de un plan formativo oficial. Por tanto, cualquier profesional proveniente tanto del campo de la Pediatría como de la Reumatología, independientemente de su formación específica en RP, puede atender en España a niños con enfermedades reumáticas. Esta situación, sin duda legal, puede repercutir y repercute en la calidad de la atención prestada.A pesar de ello no hay que perder de vista el largo camino recorrido por nuestra especialidad que ha llevado a su pleno desarrollo y reconocimiento en muchos países de la Unión Europea.
La Reumatología Pediátrica como especialidad diferenciadaLa Reumatología Pediátrica inició su andadura como especialidad en los años cincuenta del siglo pasado tanto en EE.UU. (creación de los Special Treatment Centers for Rheumatic disorders) como en Europa (Taplow, Reino Unido). En aquellos años los niños eran considerados como "adultos pequeños" [1] y la Pediatría valorada por muchos internistas como una especialidad de segundo orden, por lo que los niños con enfermedades reumáticas eran atendidos por especialistas de adultos. Los primeros pediatras que empezaron a atender a niños con estas enfermedades carecían lógicamente de la formación ne-