“…No obstante, pese a sus limitaciones, Coates (1975) y Scheele (1975) defendieron su valor social y metodológico, que sigue vigente en la actualidad (Cabero e Infante, 2014). Prueba de ello es que el método se encuentra en una etapa de plena actividad, reconocimiento y desarrollo constatable por la cantidad, heterogeneidad e impacto de los trabajos publicados (Cruz y Rúa, 2018; La literatura confirma la eficacia del método Delphi para la construcción y validación de instrumentos, principalmente en el campo de las Ciencias de la Educación (Bakieva, Jornet, González, y Leyva, 2018;Cabero, 2014;George y Trujillo, 2018;López, Bernal, Leiva, y Martín, 2018), lo que lo posiciona como un método idóneo para el estudio que aquí se presenta.…”