“…Así mismo hay investigaciones como la realizada por Carvajal y colaboradores (50) que buscaba evaluar el éxito de un protocolo de carga inmediata utilizando implantes cigomáticos, en combinación con 4 implantes convencionales en la región maxilar anterior, se tomó una muestra con 8 pacientes que fueron operados satisfactoriamente y no presentaron complicaciones quirúrgicas durante la inserción implantaría, obteniendo un promedio de estabilidad primaria (medido con el instrumento Ostell Mentor) para un torque quirúrgico de inserción de 72,3 y 46,4 Ncm para los implantes cigomáticos y los implantes convencionales respectivamente. La tasa de éxito para los implantes convencionales y cigomáticos, como para el tratamiento protésico, fue del 100% después de 18 meses de carga funcional, por lo que los autores consideran que permiten una terapia altamente predecible en la ejecución de un protocolo de carga protésica inmediata, además de ser una alternativa altamente eficiente, sin largos tiempos de espera para los pacientes.…”