Studying the Downstream Effects of Fact-Checking on Social Media: Experiments on Correction Formats, Belief Accuracy, and Media Trust

Abstract

Repeated exposure to misinformation not only reduces the accuracy of people’s beliefs, but it also decreases confidence in institutions such as the news media. Can fact-checking—journalism’s main weapon against misinformation—worsen or ameliorate distrust in journalists and the media? To answer this question, we conducted two pre-registered experiments in Chile (total N = 1,472) manipulating message and receiver factors known to regulate the persuasiveness of fact-checks: transparency elements, arousing images, and political alignment. The results of both studies show that, across message formats, fact-checks are similarly effective at reducing people’s misperceptions. However, these positive effects on belief accuracy come at a cost: Compared to control groups, users exposed to political fact-checks trust news less and perceive the media as more biased, especially after reading corrections debunking pro-attitudinal misinformation. We close with a discussion of the theoretical and practical implications of these findings.

How Effective Are Fact-checks in Pakistan and Who Engages with Them?

“…This increase in fact-checking efforts can be credited, at least in part, to their effectiveness in combating misinformation (Graves, 2018). For example, Bachmann and Valenzuela (2023) demonstrated the consistent effectiveness of fact-checking in dispelling misconceptions across various message formats, impacting trust in journalists and the media. Similarly, Zhang et al (2021) observed a positive shift in vaccine attitudes when fact-checking labels were incorporated into misinformation posts, compared to a control condition.…”

Mentiras, prejuicios y rechazo. El uso de la desinformación para propagar discursos de odio contra personas migrantes y refugiadas en redes sociales: un estudio articulado del caso español

“…Por su parte, De keersmaecker y Roets (2017) identificaron que las correcciones son más efectivas en consumidores de información con mayores habilidades cognitivas. También se ha estudiado cómo la efectividad del fact-checking depende de las preferencias políticas de los individuos (Aruguete y Calvo, 2022;Bachmann y Valenzuela, 2023;Hameleers y van de Meer, 2020;Li et al, 2022;Shin y Thorson, 2017). Otros trabajos, como el de Chan et al (2017), han subrayado que los efectos de los desmentidos son menores cuando las audiencias han generado argumentos que apoyan la desinformación original, algo que refuerza el poder del sesgo de confirmación.…”

“…A pesar de las limitaciones que se han mencionado, la investigación está generalmente convencida de la efectividad de la verificación y los desmentidos (Bachmann y Valenzuela, 2023;Ecker et al, 2019;Li et al, 2022;Porter y Wood, 2021;Walter et al, 2021). Walter et al (2020), en uno de los metaanálisis más completos hasta la fecha, coinciden en afirmar que los efectos del fact-checking son positivos, a pesar de tener una efectividad limitada en función de las características de los consumidores.…”

“…Dada la relevancia que el fact-checking y la verificación han adquirido en el contexto mediático actual en las sociedades democráticas (Graves, 2017), han sido numerosos los trabajos que se han centrado en el análisis de estas iniciativas, tanto en busca de los formatos más efectivos de desmentido (Ecker et al, 2019) como analizando sus potenciales efectos. Además de su ya referida efectividad en la lucha contra la desinformación, es importante destacar que el fact-checking puede desembocar en un creciente escepticismo y un descenso en la confianza en los medios de comunicación y el trabajo periodístico (Bachmann y Valenzuela, 2023;Stubenvoll et al, 2021). Fue también en el marco de la IFCN que 19 medios de 13 países de la Unión Europea se juntaron para luchar contra la desinformación en el marco de las Elecciones al Parlamento Europeo de mayo de 2019 a través del fact-checking.…”