A partir de la década de 1990, la población rural del oeste de La Pampa (Argentina) modificó en forma acelerada sus formas de producir arquitecturas domésticas. Las representaciones sociales sobre los materiales constructivos, la adaptación al manejo irregular del río Atuel y las intervenciones del Estado desde las políticas públicas relacionadas a la vivienda, motivaron cambios en las elecciones tecnológicas de los grupos de la región. Este trabajo plantea como objetivos: exponer el avance de la industrialización de los materiales de la construcción y sus técnicas asociadas en los puestos de Paso Maroma y Paso de los Algarrobos, reflexionar sobre el rol del Estado en este proceso y, por último, caracterizar las dinámicas en la frontera de expansión económica entre la utilización de materiales industrializados y las prácticas locales asociadas a sistemas constructivos con tierra y entramados. Para ello, se utiliza una metodología cualitativa que cruza la revisión de fuentes documentales con trabajo de campo realizado desde 2018. Los resultados indican que existe un diálogo entre dos modelos de producción de las arquitecturas cuyo límite territorial no es claro, sino que conviven en una frontera donde la resistencia y la superposición de las prácticas son continuas.