“…Partiendo de las aplicaciones más prominentes de la visión artificial como el reconocimiento de rostros (Parmar & Mehta, 2014;Franco, Ospina, Cuevas, & Capacho, 2015), reconocimiento de gestos con las manos (Rautaray & Agrawal, 2015;Balaguera, 2016), reconocimiento de huellas (Ferrin, Magdalena, Loaiza, López & Henao, 2014), inspecciones de procesos (García, Plata & Quintero, 2017) y el reconocimiento de formas enfocadas a las placas de autos (Azad & Baghdadi, 2014) y señales de tráfico (Berkaya, Gunduz, Ozsen, Akinlar & Gunal, 2016), y enfocando la visión artificial en las necesidades de detección de una plataforma voladora con brazo robótico, se observa la posibilidad de hacer que esta tecnología en desarrollo sea viable y asequible en el futuro.…”