Enseñar y deleitar fueron los dos objetivos que se autoimpuso el jesuita expulso Antonio Eximeno al escribir su novela Investigaciones músicas de Don Lazarillo Vizcardi a comienzos del siglo XIX. Asumiendo la naturaleza doble del texto −como tratado de elocuencia musical y como obra de ficción−, en este trabajo se examina su largo proceso de gestación, se analiza su inserción en distintas tradiciones didácticas (en particular, las asociadas al tratado musical y al Arte Poética de Horacio), y se discute su género literario en función de las reflexiones trazadas por el autor en paralelo a lo expuesto por los teóricos de la época.Palabras clave: novela; tratado musical; didáctica musical; género literario; fábula; comedia; historia; Antonio Eximeno; Quinto Horacio Flaco; Quijote.El manuscrito llegó a Valencia, procedente de Roma, en 1806. Su autor, el jesuita expulso Antonio Eximeno (Valencia, 1729-Roma, 1809, había estado trabajando durante años en una novela satírica con trama musical. La tituló Investigaciones músicas de Don Lazarillo Vizcardi, con ocasión del concurso a un magisterio de capilla vacante, pero no llegaría a verla publicada 1 . Tras llegar a España, el documento vivió una serie de peripecias que casi acaban con su existencia 2 . Y, cuando al fin se convirtió en libro, tuvo que enfrentarse a las críticas de quienes, con demasiada frecuencia, ni siquiera lo habían leído 3 .