“…El segundo ciclo neoliberal latinoamericano también coincidió con un débil segundo ciclo progresista, en el cual el presidente Gabriel Boric en Chile se ubicó en la derecha; Luis Arce en Bolivia llegó al rompimiento con Evo Morales; Alberto Fernández en Argentina defraudó las expectativas sociales; en tanto Andrés Manuel López Obrador en México se erigió como la figura progresista-radical más importante en toda la región; Luis Inácio Lula retomó las riendas del progresismo en Brasil; Gustavo Petro triunfó en Colombia y dio inicio al ciclo antineoliberal; en tanto Pedro Castillo fue derrocado en Perú. En Ecuador, a Moreno sucedió el gobierno del banquero y millonario Guillermo Lasso, otro de los presidentes empresarios Paz y Cepeda 225 journals.tplondon.com/yeiya de América Latina (Nercesian, 2020). Con él no solo se profundizó el modelo empresarialneoliberal, sino que adquirió características de dominación oligárquica, semejantes a las del "período plutocrático" entre 1912-1925, que antecedió a la Revolución Juliana (es la segunda "época plutocrática" en el país): privilegio de élites económicas, captura del Estado, exclusión de los intereses laborales, sociales y ambientales, reforzamiento de las consignas para achicar al Estado, estrangular inversiones públicas, privatizar bienes y servicios, reducir impuestos con la idea de llevar adelante "incentivos tributarios", flexibilización laboral y la continuidad de las políticas represivas sobre los movimientos sociales, como la que ocurrió en junio de 2022 contra los indígenas.…”