“…Actualmente, el cambio constante que ocurre en el conocimiento científico requiere de la generación de prácticas educativas que estimulen habilidades de aprendizaje que sirvan a los estudiantes para analizar la información continuamente, para lo cual es difícil sustentar la educación basándose en la réplica de los modelos docentes pasados 2 , y por tanto, es esencial contar con docentes autodidactas en su disciplina 2,3 . Existe evidencia sobre la relación que tiene el aprendizaje autodirigido con variables como el perfil sociodemográfico y académico 4,5 , los estilos y estrategias de aprendizaje 6,7 , metacognición 8 y factores predicitivos de índole afectiva y académica, evidenciando que estudiantes autodirigidos presentan mayor dirección de su propio aprendizaje, confían más en sus capacidades para enfrentar la realidad, planifican de manera efectiva sus tiempos, además de involucrarse efectivamente en ellos [9][10][11] . Asimismo, se ha observado una serie de factores psicoeducativos que pueden influir en la disposición o interés por aprender, ya sean motivacionales, relacionales o afectivos 12 .…”