¿Por qué se identifican tan pocas víctimas de trata de seres humanos?

Abstract

En este trabajo se reflexiona sobre el número de víctimas de trata de seres humanos identificado en España en los últimos años. 2.209 víctimas con fines de explotación sexual y 439 con finalidad de explotación laboral han sido identificadas entre los años 2014 y 2017. Se trata de cifras reducidas si se contrasta con las informaciones de liberación de víctimas que ofrecen los medios de comunicación social. Los datos de organismos internacionales sitúan a la trata con fines de explotación laboral superior en volumen a la sexual y se cuestiona las bajas cifras obtenidas y los posibles obstáculos que pueden estar implicados. Se profundiza sobre las dificultades de detección e identificación de las víctimas de trata de seres humanos, encontrando factores relacionados con la situación personal de las víctimas, aspectos que los profesionales y las instituciones deben mejorar para avanzar y la necesidad de clarificar realidades sociales diferentes que se conceptualizan como similares.

¿Españolas en el trabajo sexual? Rutas de movilidad

“…Las informaciones obtenidas de todos los participantes apuntan a un escaso número de casos de trata sexual en Ginebra, y los pocos detectados eran puestos en conocimiento de la policía. Aunque en España no existen muchos casos identificados anualmente (menos del millar anual), se presenta un déficit de detección de las posibles víctimas de trata sexual, que se ha relacionado con diversos factores entre los que se encuentran la falta de una legislación clara (Meneses-Falcón, 2019;Meneses-Falcón et al, 2021).…”

La relación de compraventa en la prostitución

“…Estas medidas han sido estudiadas y evaluadas y se ha constatado que más que beneficios provocan ocultamiento y desplazamiento de la actividad a otros espacios, sin que se consiga la reducción de la demanda como se esperaba (Campbell y Storr, 2001). En esta línea encontramos que en España se han producido medidas de control y prohibición de la prostitución callejera denominadas Medidas de Convivencia Ciudadanas en los Espacios Públicos (Meneses, 2019). Dictadas por los Ayuntamientos en algunas localidades españolas entre el 2005 al 2015, más exactamente en 51 municipios.…”

The Invisibility of Labour Trafficking in Spain. A Critical Analysis of Cases and Policies

“…International academic literature has pointed out several reasons to support this statement. Firstly, the fact that research and policies have almost exclusively focussed on sexual exploitation has diverted efforts from other forms of trafficking (Broad and Muraszkiewicz, 2019;Cockbain et al, 2018;Meneses, 2019;Rodríguez, 2014;Skilbrei, 2017;Weitzer, 2014;Zhang, 2012). Human trafficking has been socially constructed as a problem related to the sexual exploitation of women and girls who present certain characteristics that real trafficking victims are supposed to have, overlooking those who fall outside this stereotypical conception (Broad et al, 2019;Meneses, 2019).…”

“…Secondly, detection and prosecution of labour trafficking cases is overly dependent on victims. Investigations do not usually begin unless victims report their own situation to law enforcement authorities, which is unlikely to happen since they often do not trust them, and they fear sanctions and deportation for their irregular migration status (Barrick, Lattimore, Pitts and Zhang, 2014;Meneses, 2019;Van der Leun, 2017). Besides, some trafficked people are unlikely to come forward, because they do not identify themselves as victims, but rather as 'active agents of their migration projects', who may perceive 'exploitative labour conditions as a necessary step in their upward labour market mobility' (Van Meeteren and Hiah, 2019, p. 5).…”

“…They can begin as an acceptable work situation, which will gradually deteriorate into violations of labour rights, severe labour exploitation or even forced labour (Skrivankova, 2010). That is why many authors have highlighted the need to define exploitation as a continuum between decent work and forced labour, which recognises the existence of degrees of exploitation (Andrees, 2008;Meneses, 2019;Plant, 2012;Skrivankova, 2018;Skrivankova, 2010;Van Meeteren et al, 2019a). This would serve to include in the definition of trafficking cases in which the levels of coercion are different, but also cases in which the conditions change over time (Andrees, 2008).…”