“…En este sentido, se ha identificado la relación que existe entre las concepciones y hábitos de literacidad del profesorado, sus prácticas de enseñanza y mediación lectora y el modelamiento de la motivación en literacidad del alumnado (Errázuriz et al, 2019;Benevides & Peterson, 2010;Morrison, Jacobs & Swinyard, 1999;Muñoz, Munita, Valenzuela y Riquelme, 2018). En efecto, se ha observado que el profesorado escolar chileno que presenta perfiles lectores más epistémicos asocia las prácticas de lectura con el placer, media la lectura de sus estudiantes, se interesa por motivarla y son más inclusivos (Errázuriz et al, 2019;Errázuriz et al, 2018). Sin embargo, sabemos que aún existe una resistencia por parte de los profesores de otras asignaturas respecto de mediar la lectura, pues creen que es una práctica propia de la escuera de la lengua (Muñoz et al, 2016;Carlino, 2005) y no necesariamente una actividad habitual en todas las disciplinas; por tanto, predomina un enfoque generalista y poco contextualizada de la lectura (Shanahan & Shanahan, 2012).…”