“…Entre sus ventajas se encuentran su sensibilidad y su especificidad del 100%, capaz de distinguir entre las formas oclusivas y no oclusivas, y permitir administrar fármacos trombolíticos y vasodilatadores arteriales 4 . Sin embargo, tiene también inconvenientes, siendo los más relevantes el hecho de ser una prueba invasiva, su potencial nefrotóxico, la alta dosis de radiación, su limitada disponibilidad y el elevado coste económico7 .En segundo lugar, los autores no citan las formas secundarias o no oclusivas de IMA, que es importante conocer, ya que a veces plantean problemas diagnósticos con las formas primarias de IMA 8 . Ocurren en aproximadamente en el 20-30% de todos los casos de IMA 8 y son debidas a hipoperfusión que puede afectar a todo el intestino, si bien incide especialmente este bajo flujo en el intestino delgado y el hemicolon derecho, al ser estas zonas de especial susceptibilidad en el riego sanguíneo intestinal.…”